Existe un dicho popular que dice que a “Nepal se viene por las montañas, pero se vuelve por su gente”. Pero si el enclave geográfico es único, rodeado de naturaleza montañosa, también es cierto que la riqueza de un país reside en su gente. Es difícil no enamorarse de este país.
El principal núcleo urbano es su capital en Katmandú. Su lengua oficial, el napalis y el inglés. Una de las curiosidades de esta sociedad es que siendo el lugar de nacimiento de Siddharta Gautamas, Budha, en la localidad, Lumbini, la religión mayoritaria es la hindu.
Nepal, es un país pequeño, situado entre el Tibet y la India, con una naturaleza montañosa inigualable, donde se pueden encontrar algunas de las cumbres más famosas del mundo, como el monte Everest. Es imprescindible visitar: el parque Nacional de Royal Chitwan, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, que cuenta, entre otros, con rinocerontes indios, 450 especies de aves, leopardos de las nieves, osos, monos, cocodrilos y delfines del Ganges, el lago Phewa uno de de los más grandes del país. Un destino que cuenta con todas las facilidades para el turista. El visitante puede sentirse seguro y tranquilo, puede moverse solo o acompañado, bien sea en ciudades grandes o pueblos.
Nepal es un país muy tradicional y patriarcal donde las tradiciones, especialmente en núcleos pequeños se van transmitiendo de generación en generación. Incluso muchos de los matrimonios son acordados entre las familias. Considerado como uno de los países más pobres del mundo; ha vivido procesos de transición política desde el año 2008. Cuando pusieron fin a la monarquía absoluta y desde entonces el Estado ha sido testigo de firma de acuerdos de paz entre los maoísta. Además de una Constitución interina y hasta cinco Gobiernos electos. Sin duda muchos acontecimientos en tan poco tiempo. Pero hubo uno que realmente marcó al país y fue el terremoto que sufrió en el año 2015. Murieron más 10.000 personas, dejando sin casa a miles de personas.
Conoce nuestras historias sobre Nepal
Como ya hemos mencionado antes Nepal es una sociedad estrictamente patriarcal relegando a la mujer al hogar y la administración de los recursos. Un país que aunque está resurgiendo con el turismo es principalmente agrícola. Aunque la constitución concede la igualdad de acceso a la educación a la mujer, las tasas de inscripción son muy bajos comparado con el de los hombres, y con salarios con un 25% menos que los percibidos por ellos.
La situación de la mujer y los niños no es muy alentadora. Ellas no tienen derecho a herencia. Se da la circunstancia que las mujeres que tienen hijas, muchas veces son maltratadas físicamente por sus maridos e incluso hay hombres que se divorcian por eso. En ocasiones la Policía no siempre investiga las denuncias de violación. Pero quizás los más doloroso es cuando afecta a los/as niños/as, esa sonrisa inocente que se apaga con la crueldad social. En muchos casos viven bajo el índice del umbral de la pobreza. Entre otras cosas, porque el sistema sanitaria carece de materiales adecuados.
Debido a este sistema patriarcal tan arraigado existe la diferencia entre niños y niñas como por ejemplo: el matrimonio de conveniencia de las niñas que las aparta del sistema educativo. En general la educación es bastante pobre con falta de infraestructura, materiales y personal.
Otros problemas sociales que afecta a los niños y niñas del país son: el trabajo infantil. Donde son explotados en fábricas o limpiando casas. El escalofriante tráfico de menores, muy extendido en Nepal (no existe ninguna ley contra la pedofilia), el comentado matrimonio infantil.
Los niños necesitan mucha ayuda. Por eso, dos de los programas de voluntariado en Nepal se centran precisamente en la enseñanza y empoderamiento de la niñez y la juventud. Si quieres ayudar a niños, niñas y jóvenes, esta es tu oportunidad. Colabora y haz tu contribución. Tu aportación es fundamental para el desarrollo de las habilidades y conocimiento de nuestros niños.