Lo peor de mi vida en una Quebrada
Nací en Costa Rica y de padres nicaragüenses, cuando yo tenía dos años mi madre se fue de la casa en una dirección desconocida, yo y mis otros tres hermanos, quedé al cuidado de mi padre que nos dio a diferentes personas para que nos cuidaran. En mi caso, con mucha suerte, fui recibida por mi tía en Nicaragua
Lo que cambió mi vida
En una fecha no exactamente recordada del mes de noviembre de 2017, fui como de costumbre a lavar la ropa de mi tía en un barranco situado a unos 200 metros de mi casa y de repente apareció un hombre que supuestamente trabajaba en un proyecto de carretera, me llevó por la fuerza y me hizo daño. Mis intentos de defenderme y los gritos fueron inútiles porque nadie podía ayudarme. Volví a casa y debido a las amenazas de muerte que recibí no le dije nada a mi tía.
Quedé embarazada cuando sólo tenía 12 años, por la violación que sufrí. Un médico del centro de salud me conocía y busco ayuda y atención especial debido al alto riesgo de mi embarazo, por mi edad y por lo que había pasado. Debido a esto, una mañana varias personas se presentaron en mi casa y se ofrecieron a ayudarme en un lugar donde podía dar a luz a mi bebé y ser capaz de asumir toda la responsabilidad que se venía venir. Pero esta vez no sola.
Todo esto que me ha tocado vivir, no lo hubiera superado, sin el apoyo de todas las personas que han estado allí y se han preocupado por darme atención como salud, alimentación, educación, refuerzo escolar.
Una de las lecciones que tuve que aprender antes de tiempo fue:
Ser madre antes que hija
Hemos querido compartir contigo una historia de una de las jóvenes que forman parte y es beneficiaria del proyecto «Un niño, una mochila»
Quieres conocer más sobre este proyecto y cómo ayudar ponte en contacto con nosotros al correo info@adventurevolunteer.org o evelin@adventurevolunteer.org